Para que sus hijos aprendan a cuidar su cuerpo

Una amiga mía que no quiero decir su nombre ni quiero poner aquí un link a su blog porque me da envidia de lo bien que lo lleva y de su forma de abrirse el pecho (si, porque Noemi mas que hablar de los sentimientos, hace poesía de lo que siente ... ahhh, se me fue el nombre), me envió la foto de marras ... bueno, de estos juguetes que hacen los japoneses y que venden los japoneses para que los niños japoneses aprendan a usar el cuerpo ... de otros niños japoneses.

Las instrucciones están escritas ... ¿ya saben en qué?. Pues no pude leerlas porque tengo problemas de presbicia y no traje los espejuelos. Así que recurrí nuevamente a mi amiga indagando por tan singular (¿no son dos?) juguete.

Resulta que el objetivo de semejante artilugio con intención de parecerse a un par de tetas (digo de parecerse porque las de la izquierda parecen un flan y las de la derecha ... se parecen un poquito mas ... depende con cuales las compares ... si las comparas con las ... basta!) es que un par de niñas (o de niños o cualquier combinación de ambos sexos ... ¿sexos y tetas? bonita combinación ... ¿serán de silicona?) tomen una teta cada una y la golpeen repetidamente a ver cual de las dos la golpea con mayor frecuencia. Vaya, un juego la mar de entretenido. Voy a hablarme con estos japos para en lugar de poner un par de tetas de esas, que simbolizan la fertlidad femenina y el deseo masculino, pues ponga por ejemplo la cabeza de mi jefe, o la cara de mi suegra. O sea, algo que merece ser golpeado.

A este paso no me sorprendería encontrarme un día en una juguetería en ya saben que país , una venta de porras para niños, para que se golpeen y que tengan como figura central ustedes-ya-saben-que.